Klipsch apuesta por el sonido inalámbrico también en los subwoofers. Ciertamente en más de una ocasión aficionados que han querido instalar uno o dos subwoofers en sus sistemas de home cinema o de audio , se encuentran con la limitación de su ubicación.
Obviamente no todos disponemos de sala dedicada para audio y cine en casa , con lo que situar el equipo en el salón principal de casa suele ser la opción mayoritaria y ahí nos encontramos con la problemática de ubicar un “ cajón voluminoso “ conviviendo con los muebles y resto de elementos decorativos. En muchos casos la solución , no ideal musicalmente , pero sí por los condicionantes decorativos , es colocar el subwoofer alejado del procesador, amplificador o receptor AV que lo gestiona. Es ahí donde nos encontramos con otra problemática estética y hasta cierto punto costosa : tener una larga tirada de cable de conexión al suwboofer.
Estos nuevos modelos de subwoofers inalámbricos Klipsch nos aportan esa flexibilidad de ubicación con una gran calidad de sonido.
Los Klipsch R-10SWi y R-12SWi han sido desarrollados para ofrecer a los auténticos audiófilos unos bajos potentes y equilibrados, además de la capacidad de comunicarse con las fuentes de manera inalámbrica. El usuario tan sólo deberá escoger el modelo que se ajusta más a sus necesidades y comenzar a disfrutar de sus contenidos de audio. Ideales para grandes o pequeñas salas En función de las dimensiones de la sala en la que se vaya a ubicar, el usuario podrá decantarse por el modelo R-12 SWi, que presenta una medidas de 40x35x47 cm y un peso de 15 Kg, o por R-10 SWi, cuyas dimensiones son algo más pequeñas, 35x31x39 cm y su peso también más ligero: 11 Kg. Ambos ofrecen unos bajos de gran potencia que llenan las estancias sin necesidad de complicados cableados. Y es que, gracias al compacto transmisor inalámbrico preamplificado de 2.4 GHz con el que se comercializan, estos subwoofers aportan total libertad en el momento de hallar la localización deseada. |
Un diseño para el sonidoPara obtener el mejor rendimiento en ambos equipos, Klipsch ha trabajado cada detalle, desde la composición y la estructura del subwoofer hasta los materiales empleados en su desarrollo. Así, los woofers internos han sido fabricados con grafito moldeado por inyección (IMG), lo que les confiere una gran ligereza y rigidez. Esto se traduce en una notable respuesta de las bajas frecuencias con una mínima distorsión. De igual modo, las cajas están fabricadas en madera MDF con revestimiento de polímero cepillado y se completan con una rejilla frontal, fuerte y flexible, que puede desmontarse si así lo desea el usuario. Klipsch R-12 SWi y R-10 SWi también están provistos de un controlador de alto rendimiento que es el responsable tanto de los graves más profundos como de la flexibilidad de colocación. Por su parte, el amplificador totalmente digital incorporado arroja una potencia de alta precisión de 400 vatios y una gran exactitud en la reproducción. A ello suman un crossover low pass y un control de fase que hacen posible la combinación de los tonos de baja frecuencia del subwoofer con el audio de otros altavoces de la firma, así como establecer el nivel ideal de graves. Conectar y listoFinalmente, instalar el subwoofer R-12 SWi y R-10 SWi es tan sencillo como conectarlo a una toma de corriente, conectar el adaptador inalámbrico y elegir la fuente de emisión y la posición deseada. Si se prefiere, el usuario también puede comunicar el subwoofer a la fuente mediante cable. |
Fuente: Klipsch-Magnetron